Está claro que Pizzería Moloch tienen la completa devoción de nuestra audiencia, y es por eso que todos sus últimos lanzamientos han llegado al Disco de la Semana. Para cuando leas esta reseña ya estará publicado su segundo disco, Cultos de la Muerte, que seguramente en unas cuantas semanas tengamos también por aquí… pero antes, vamos a hacer una parada en El Ataúd, el último de los singles descolgados que junto a Dinamita y Punkis de la Tumba podrían haber tomado forma de EP.
Pizzería han demostrado ser incombustibles a la hora de explorar las distintas ramificaciones de la música oscura, y así, aunque en esencia se les reconoce como una banda de Post Punk, el Industrial o el Rock Gótico no les son ajenos.
El Ataúd es un medio tiempo con claras influencias de Sisters of Mercy, con esos coros que enseguida traen a la cabeza la participación de Ofra Haza en Temple of Love. Líricamente reflexionan sobre la fugacidad de la vida, y el hecho de que tarde o temprano todos terminaremos dentro de un ataúd. Un motivo recurrente también en nuestro programa, el lado alegre de ser siniestro es entender que cada momento de la vida es único y no merece la pena desperdiciarle en otra cosa que no sea intentar ser feliz.
Como virtual Cara B, el propio Andy Darke remezcla El Ataúd en una versión Electro ideal para una Rave en un club de vampiros.
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